sábado, 26 de junio de 2010

Calle de la Madera: Alta y baja



La calle de la Madera, se divide en dos tramos con distinta denominación: Madera Baja, que es el trozo de calle entre la plaza de la Luna (Santa María Soledad Torres Acosta), y la calle del Pez, y de la Madera Alta, que transcurre entre la calle del Pez y la calle del Espíritu Santo. Esta calle ya estaba perfectamente urbanizada en el plano de Texeira en el siglo XVII y en ella se han sucedido infinidad de hechos que hacen de una calle estrecha y pequeña, una gran calle cargada de historia.

Ya desde antes de ser urbanizada, allá por 1580, existían grandes depósitos de madera que provenían de distintos lugares, nacionales y extranjeras (de Indias) para las construcciones de los edificios de Madrid. Estos depósitos o almacenes de madera, perduraron durante mucho tiempo, y fueron proliferando otros corrales donde se almacenaba toda la madera traída de Valsain para la misma función.

En esta calle existió la casa de Jerónimo de Villanueva, por donde pasaban toda clase de hombres importantes de la Villa, incluido el Conde Duque de Olivares y hasta el mismísimo rey Felipe IV, momentos en que se vivieron los famosos episodios del convento de San Plácido, el cual unía un pasadizo con esta casa. Pero toda esa leyenda podéis leerla en este otro artículo: Las monjas poseídas por el diablo.

fachada del convento de San Plácido en la esquina de la calle Madera y calle del Pez




En el solar que dejara esta casa, se construyó el teatro Calderón de la Barca, lugar donde ocurrieron los hechos de aquel famoso día de diciembre de 1870, al ser estrenado una obra sátira de José Navarro Gonzalvo, titulado Macarronini I, obra que ridiculizaba al rey Amadeo I. Dos días después del estreno, en plena representación, irrumpieron en la sala y en el escenario los componentes de la Partida monárquica de "La Porra", que estaba capitaneada por Felipe Ducazcal y se armó la gresca padre.
Este teatro duró muy poco y en 1887 se convirtió en una capilla evangélica, para pasar en breve a ser la redacción e imprenta del diario republicano progresista El País. En 1921, una vez que se dejó de publicar este diario, estuvo otro diario, La Libertad, de liberalismo muy de izquierda, y de nuevo una vez desaparecido este, ocupó el inmueble el diario Informaciones. Después el edificio estuvo abandonado durante años y tras ser noticia por un famoso episodio de okupas, se construyó el Instituto para la diversificación y ahorro de la energía (IDAE).





En la esquina con la calle del Pez, se alzó el palacio de la condesa de Bornos, conocido también como palacio del marqués de Escalona y Bornos. Este palacio que anteriormente era del marqués de Bélgida, fue totalmente reconstruido en 1860 por Wenceslao Graviña. Decir como anécdota, que Los Bornos fueron dueños durante muchos años, de la inmensa y célebre pradera de San Isidro.

palacio de Bornos


fachada y escudo del antiguo palacio de Bornos hoy convertido en viviendas en la calle del Pez




Por la calle Madera, bajaba Camilo José Cela al encuentro de Tosía Vargas, su novia, que venía por la misma calle en sentido contrario, vio con sus propios ojos el escritor como un obús cayó encima de ella destrozándola. El cuenta en sus memorias que se guardó un ojo de recuerdo y que lo tenía en formol.





En esta calle también tuvo su sede durante algún tiempo el Círculo de Bellas Artes, el Hospital de mujeres incurables, la propaganda del movimiento comunista de España y el Círculo Carlista, que frecuentaban Valle Inclán y Vazquez de Mella.

colorido de las casas en la Madera Baja




También vivieron algunos personajes en ella, como es el caso del edificio del antiguo número 26 de la calle, propiedad de Francisco de Quevedo y el antiguo 18, casa donde vivió Luigi Boccherini, el compositor italiano afincado en Madrid.


Casa donde vivió Luidi Boccherini










viernes, 25 de junio de 2010

La Capilla del Obispo abre de nuevo sus puertas




La Capilla del Obispo en la Plaza de la Paja de Madrid, abre de nuevo sus puertas tras más de cuarenta años cerradas a cal y canto al culto.

Aquí podéis leer el artículo sobre la Capilla en Viendo Madrid:

La Capilla del Obispo



La noticia de hoy:


Madrid, 24 jun (EFE).- La presidenta de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, acompañada por el presidente de Caja Madrid, Rodrigo Rato, y el cardenal arzobispo de Madrid, Antonio María Rouco, inauguró hoy la recién rehabilitada Capilla del Obispo.

Los madrileños podrán visitar en breve el templo, situado en la la plaza de la Paja (distrito de Centro), ya que va a abrirse al culto después de 44 años.

El Gobierno regional ha terminado la rehabilitación integral de esta joya arquitectónica, que es uno de los pocos ejemplos del gótico madrileño que se conservan.

La capilla fue declarada Monumento Histórico Artístico, perteneciente al Tesoro Artístico Nacional, en 1931.

En la actualidad goza de la máxima protección legal, siendo declarada Bien de Interés Cultural en 2002.

En la inauguración, Aguirre destacó que "estas obras de rehabilitación son un ejemplo más del compromiso de la Comunidad de Madrid por proteger el patrimonio histórico y artístico de la región".

La Capilla del Obispo fue fundada en el siglo XVI por Francisco de Vargas y Medina, privado de los Reyes Católicos, como capilla funeraria para albergar los restos de san Isidro (actualmente en la Capilla de San Andrés).

En la década de 1970 se constató su estado de ruina y tras varias intervenciones puntuales, en 2005 la Dirección General de Patrimonio Histórico del Gobierno regional emprendió una rehabilitación integral para devolver a los madrileños esta joya integrada en el Conjunto Monumental de San Andrés.

En este proyecto se han invertido 3.252.404 euros, de los cuales la Fundación Caja Madrid ha aportado 2.117.590, el 65 por ciento del total.

Aguirre explicó que "durante las obras de restauración se han realizado importantes hallazgos, como el de un cementerio situado bajo la antigua parroquia de San Andrés, que han obligado a modificar el plan original de actuación".

Para que los visitantes puedan contemplar este vestigio del Madrid medieval, se ha instalado una ventana arqueológica sobre los restos del subsuelo de la capilla, que forma parte del complejo monumental de San Andrés, que se encuentra situado entre la plaza de Los Carros, la plaza de La Paja y la Costanilla de San Andrés.

El complejo también incluye la iglesia de San Andrés, la capilla de San Isidro, el Atrio y la Sala Capitular con dependencias anexas.

Tras la intervención de la Comunidad, el elemento de unión que conecta todas las piezas que conforman el conjunto monumental es el claustro o atrio.

Además, se ha abierto una puerta para comunicar la Capilla del Obispo con la mitad sur del monumento (iglesia parroquial de San Andrés y capilla de San Isidro).

El actual conjunto monumental de San Andrés, en el que se encuentra ubicada la Capilla del Obispo, tiene su origen en una modesta iglesia parroquial de la que fue feligrés san Isidro Labrador.

Probablemente se trata de una antigua mezquita adaptada al culto cristiano tras la conquista de Madrid a finales del siglo XI. EFE

miércoles, 23 de junio de 2010

Palacio del Cordón



El palacio del Cordón, es un edificio barroco del siglo XVII que es conocido por los dos cordones de piedra que existen a ambos lados de las orejeras de la portada principal, sobre la que está basada toda la simetría del edificio. Vanos, balcones y rejerías están diseñadas a partir del balcón principal que se haya encima de la portada que sirve de eje a la distribución.







En este viejo caserón vivieron personajes de la talla de Manuel Becerra o el alcalde de Madrid, Alberto Aguilera.

El palacio se encuentra en la plaza del Cordón y mucha gente confunde esta casa con las que existieron en el mismo lugar donde se encuentra nuestro palacio, que se llamaban Casas del Cordón y fueron las que dieron nombre a la plaza. Estas casas del Cordón fueron la residencia de los condes de Puñonrostro y se encontraban justo enfrente del palacio que nos ocupa, y que todavía hoy, lo recuerda una placa en la fachada del edificio que se levanta en su antiguo solar, separadas de la parroquia de San Justo por el callejón de puñonrostro, las cuales se unían por un pasadizo que discurría por debajo del pasadizo y de la Casa de Cisneros por la estrecha calle del Cordón. Recorría la fachada principal que daba a la plaza, un grueso cordón de piedra, tributo de la orden franciscana y sirvieron de cárcel a Antonio Pérez, el secretario traidor de Felipe II.

En el siguiente siglo se construiría esta caserona, añadiendo los cordones a su portada, tal vez por imitar un poco a sus edificios vecinos, los que verdaderamente eran la Casa del Cordón y que fueron derribados a mediados del XIX, no llegando ninguno de ellos hasta nosotros.

martes, 22 de junio de 2010

Monumento a la Violetera



El monumento a la Violetera, es uno de esos monumentos que se vuelven polémicos sin saber porqué. Fue obra de Santiago de Santiago y se inauguró en 1991 en la esquina de la calle Alcalá con Gran Vía. Se suponía que era el sitio ideal para un monumento a tantas violeteras que poblaron esa calle en otros tiempos.
Joaquín Leguina en aquél momento argumentó que era "cutre" y acusó que el monumento estaba inspirado en Celia Gámez, la que cantaba el "ya hemos pasao". Ruíz Gallardón le contestó que no le extrañaba que no entendiera el significado de personajes tan populares a pesar del tiempo que llevaba viviendo en Madrid. De una forma o de otra, el monumento fue una lucha entre el PSOE y el PP, y una noche de noviembre acabó desapareciendo del sitio donde se encontraba. Durante unos días pasó inadvertida la desaparición, hasta que un grupo de turistas que asistieron a Chicote, fueron después a visitar el monumento de la violetera para hacerse unos fotos.

El monumento fue encargado por el alcalde Agustín Rodríguez Sahagún en 1990 para inmortalizar la música del compositor José Padilla. Pero en el año 2000 fue retirado a los almacenes municipales donde estuvo dos años, hasta que en 2003 y tras otra polémica para su nueva ubicación, algunos querían enfrente de algún teatro en que se hubiera representado La Violetera, como La Latina, el Pavón o incluso enfrente de la ermita de San Antonio de la Florida. Pero su emplazamiento definitivo sería el Parque de las Vistillas, donde hasta el día de hoy se encuentra este singular monumento, con una placa que reza:

Como ave precursora de primavera
en Madrid aparece la violetera