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martes, 21 de septiembre de 2010
Fuente de la Cibeles
La Fuente de la Cibeles, representa a la fecunda deidad, hija del cielo y de la tierra y hermana de Saturno. La diosa tiene una corona mural y está reclinada en el carro del que tiran dos leones. El diseño fue de Ventura Rodríguez, y es la primera de las tres fuentes monumentales que proyectó para el Salón del Prado, a instancias del rey Carlos III. Está construida con mármol de Montesclaros (Toledo) y piedra de Redueña (Madrid), por Francisco Gutiérrez, que hizo la estatua de la diosa, Roberto Michel, que labró los leones y Miguel Ximénez el que la adornó.
La Fuente estuvo en sus orígenes, situada junto al Palacio de Buenavista, y mirando a la de Neptuno y en aquéllos momentos, la Plaza donde está ubicada, se llamó "Plaza de Madrid".
La Fuente de Cibeles en su ubicación original al lado del Palacio de Buenavista
En aquellos momentos la Fuente estaba a un lado de la Plaza y mirando hacia Neptuno
Habría que esperar hasta 1900, para que el nombre se cambiara a "Plaza de Castelar". Lo curioso de esta Plaza, que muchos no conocen, es que de los cuatro edificios que la forman, cada uno pertenece a un barrio distinto.
El proyecto se realizó entre 1777 y 1782, y la Fuente estaba destinada para los jardines del Palacio de la Granja de San Ildefonso en Segovia, pero una vez que se empezó a remodelar el Salón del Prado, la Fuente fue colocada en la Plaza, aunque no empezó a funcionar hasta 1792. Durante más de 100 años, la Cibeles estuvo ubicada junto al Palacio de Buenavista y mirando a Neptuno, hasta que en 1895, en medio de una gran polémica entre el Ayuntamiento y las Bellas Artes de San Fernando, la Fuente fue trasladada al centro de la Plaza.
La Fuente en su ubicación definitiva, mirando hacia Alcalá y en el centro de la Plaza
Pero pasemos a describir un poco la Fuente:
La diosa está sentada en un carro sobre unas rocas, que se elevan en medio de un pilón redondo. Lleva en sus manos un cetro y una llave y en el pedestal hay un mascarón que eleva agua por encima de los leones, hasta llegar al pilón. También hay una rana y una culebra que muy pocos conocen. Los dos leones que tiran del carro, representan a personajes mitológicos: Hipómenes y Atalanta, convertidos en leones de piedra por Zeus, que les pilló haciendo el amor en uno de sus templos, y por eso, Cibeles los puso a tirar de su carro para mantenerlos siempre juntos. Otra leyenda cuenta que fue la propia Cibeles quién les convirtió en leones de piedra por haber hecho el amor en uno de los templos sagrados de la diosa.
La Fuente de Cibeles, la conocemos hoy como un monumento artístico, pero en sus comienzos, fue de utilidad para los madrileños, ya que tenía dos caños de los que se podía coger agua hasta 1862. En uno de ellos, los aguadores oficiales y del otro, todo el público. Del pilón bebían los caballos. Además, hemos de comentar, que eran de muy difícil acceso para recoger el agua, ya que los caños se encontraban donde hoy en día están los surtidores y por eso el Ayuntamiento decidió cambiar los caños, por dos figuras simbólicas que representaban un oso y un lagarto mitológico (grifo), que además se colocaron mucho más accesibles para el público.
En 1895, cuando se la situó en el centro de la Plaza, se le puso una verja alrededor para evitar el acceso a la fuente, subiéndola de altura. La verja duró poco tiempo y se volvió a quitar. En aquél momento, la mayoría de la gente ya tenía agua potable en sus casas y la función que daba la Fuente, no tenía utilidad, con lo cual se aprovechó para quitar el oso y el grifo. Fue el momento en que se le añadieron los famosos "Amorcillos" en la trasera de la Fuente, por los escultores Miguel Ángel Trilles y Antonio Parera. Uno sujeta una ánfora que echa agua y el otro una caracola.
A mediados del siglo XX, la fuente fue remodelada de nuevo, momento en que se la añadieron nuevos surtidores, cascadas y la iluminación nocturna.
El 18 de Junio de 1986, Emilio Butragueño, jugador del Real Madrid, marcó cuatro goles en la Copa Mundial de Fútbol de 1986 en México, cuando jugaba contra Dinamarca en la eliminatoria de octavos de final. Decenas de personas se concentraron a los pies de la diosa Cibeles, y estando muy cerca las elecciones generales que se celebrarían ese año, se oyeron los gritos de "oa, oa, oa... Butragueño a la Moncloa". Fue el comienzo de la tradición de que el Real Madrid, celebrara sus victorias y sus títulos en la diosa Cibeles, que ya va para 24 años. Al principio todo el mundo se encaramaba a la Fuente, pero hace ya algunos años, que solamente el capitán del equipo, subirá a poner la bufanda a la diosa, mediante una pasarela. Esto está firmado en un acuerdo entre el Ayuntamiento y el Real Madrid.
También hemos de comentar, que la diosa ha sido víctima de la barbarie callejera, y en dos ocasiones, le mutilaron y robaron una mano. La primera vez apareció, pero la segunda, hubo que construir una nueva que ya no es la original.
La Diosa Cibeles sigue ahí, en mitad de la Plaza que lleva su nombre desde después de la guerra, y mirando hacia Sol, donde empiezan todos los caminos de Madrid. Rodeada de cuatro magníficos edificios representativos de la ciudad, como son, el Palacio de Buenavista (cuartel General del Ejército), el Banco de España, el Palacio de Linares (Casa de América) y el Palacio de Correos y Comunicaciones (Ayuntamiento de Madrid), (edificios que iremos viendo uno a uno en otros artículos en este blog) y muy cerca de sus colegas Apolo y Neptuno. La Cibeles ha sido, es y será... uno de los grandes símbolos de Madrid.
La Fuente resguardada durante la guerra, para su protección
Fuente de las fotos antiguas: VIEJO-MADRID Y URBANITY
Hola Bélok.
ResponderEliminarFantásticas fotografías y felicidades también por el texto (no por conocido el monumento, se dejan de descubrir cosas). Imagino que las fotos las hiciste de cerca, pese a la difícil accesibilidad del monumento para el peatón. Toda una proeza, entre tanto coche.
En una de las fotos antiguas, he creído ver que la base de la fuente estaba cubierta de vegetación, tal vez hiedra. Si es así, resulta muy curioso.
Un abrazo.
Lo único que no me gusta de la Cibeles es que tenga que ser asaltada por los seguidores del Madrid cuando cae algún título. Que conste que soy del Atleti y tampoco me gusta lo de Neptuno. ¿No hay suficiente sitio en los campos de fútbol de cada uno para celebrarlo allí?
ResponderEliminarSaludos
Genial la foto de los vendedores de la época sentados a sus pies, Belok. Muy chulo el post.
ResponderEliminarSaludos,
En la segunda fotografia se puede ver como era el neocásico palacio de Buenavista originalmente sin el añadido de la última planta que desproporciona el edificio y achata el tímpano central (lo mismo ocurre en el edificio de la Comunidad de la Puerta del Sol con el añadido de la torre del reloj).
ResponderEliminarSaludos
Que bonita es la Cibeles vista desde tan cerca. Estupendas fotos Belok.
ResponderEliminarNunca te acostarás sin saber una cosa más...
ResponderEliminarEn tu blog siempre se aprende algo.Felicidades...
Sigo prefiriendo al dios Neptuno,pero nuestra diosa es una preciosidad también...
Muchas gracias por el interesantísimo blog y por el interés que muestras. Fantásticas fotos que nos enmarcan en un lugar de la historia que es nuestro, aunque no lo sepamos reconocer. Ánimo.
ResponderEliminarBUenas tomas Bélok, así da gusto ver la monumentalidad de Madrid. Por cierto, la foto de la diosa protegida contra los impactos durante la Guerra Civil no la conocía.
ResponderEliminarSalud-os.
Que bonita fuente,de Montesclaros es la piedra,de la provincia de Toledo,hay un monumento,con la misma piedra que la cibeles en Montesclaros dedicado a los fundadores del pueblo.
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