El edificio Carrión, conocido popularmente como el edificio Capitol, es tal vez, el edificio más famoso de toda la Gran Vía madrileña. Su cartel de Schweppes iluminando las noches de Madrid, han creado todo un símbolo reconocible en cualquier parte del mundo. Fueron los arquitectos Luis Martínez Feduchi Ruiz y Vicente Eced y Eced los que proyectaron el edificio entre 1931 y 1933. El famoso monstruo de granito y hormigón, se encuentra en una de las zonas más características de la urbe, entre las calles de Jacometrezo y la Gran Vía, en la Plaza de Callao.
El edificio tiene catorce plantas y es de estilo art-déco, al más puro estilo neoyorkino. Un edificio que en los años 30 cuando se construyó, fue todo un logro modernista de la ciudad, una construcción que todavía hoy sigue siendo moderna y actual, a pesar de tener casi 80 años de vida.
Parece mentira que de aquella época podamos tener un edificio con esos avances tecnológicos. Se utilizaron vigas de hormigón, telas ingnífugas y un sistema de refrigeración sin precedentes y pionero en Madrid, siendo centralizado y ocupando toda una planta.
Obtuvo el premio del Ayuntamiento de 1933 y la medalla de segunda clase en la Exposición Nacional de Bellas Artes del 34. El edificio cuenta con un hotel en su interior, una tienda de ropa famosa, apartamentos y oficinas.
En sus locales comerciales antiguamente se ubicaba una famosa cafetería en donde mi hermana celebró el banquete de su primera comunión, a la cual, asistió en un cadillac blanco desde la iglesia, mientras que yo a mi primera comunión fui andando hasta la parroquia, y es que en mi casa también siempre hubo clases... jajaja. La verdad es que estaba preciosa. Su vestido blanco, su corona, y esa carita de ángel, en el flamante coche blanco de 6 metros, llegando al edificio Carrión, donde se encontraba la Cafetería Manila que ocupaba las plantas baja y primera, donde le esperaban cientos de invitados y de donde se podían tener unas vistas magníficas de la Gran Vía. Pero no pondré una foto por eso de los derechos de imagen, no vaya a ser que mi propia hermana me demande o me exija un canon que está tan de moda.
El Capitol aloja el que fue hasta hace unos años, el cine más grande de la capital, el Cine Capitol, una sala para 2.000 espectadores, ahora convertido en varias salas, como ha pasado con casi todos los grandes cines en nuestra ciudad. Con el tiempo estamos perdiendo las grandes salas de proyecciones, cines como el Avenida, el Palacio de la Música, el Palacio de la Prensa, el Lope de Vega, el Rex, el Coliseum, el Gran Vía, el Rialto o el Azul, nos han ido abandonando del entorno de la Gran Vía, unos han desaparecido para siempre y otros ha ido transformándose en varias salas, y en el mejor de los casos, en salas para musicales y espectáculos.
Solar donde se construiría el edificio
Fotos desde los años 30, hasta nuestros días.
El primer propietario fue Enrique Carrión, marqués de Nelín y desde el año 2007, en una rehabilitación del edificio dirigida por el arquitecto Rafaél de la Hoz, se eliminaron todos los anuncios publicitarios que colgaban de su fachada. Anuncios que tantos y tantos años perduraron a nuestros ojos, desaparecieron para siempre, volviendo a dejar la fachada curvada de Callao, en todo el esplendor de cuando se construyó. Solamente quedó un anuncio en la parte superior de su frontal, aquél que ha sido protagonista en numerosas películas, como en el caso de "El día de la bestia" de Álex de la Iglesia. Aunque es también un poco forzado decirlo, ya que también existen muchas películas donde el edificio salía con toda la parafernalia de carteles que tenía antes, pero de una forma o de otra, ese cartel es el que han querido que siguiera allí, junto a uno nuevo en la azotea de una empresa de telefonía móvil, Vodafone. La verdad es que la estampa del anuncio luminoso de Schweppes, es todo un símbolo de la Gran Vía y de la ciudad de Madrid, una especie de "Tio Pepe" en la Puerta del Sol y del toro de Osborne en las carreteras españolas.
Todo un símbolo ya de Madrid, el letrero de Schweppes, único superviviente de la fachada del edificio
Fuente de la fotos antiguas: URBANITY
Mil veces que he pasado por ahí y nunca me había fijado en la marquesina que se ve en una de las fotos antiguas incluidas. Es realmente bella... Mil gracias por las fotografías, tanto las viejas como las nuevas. Son un placer. Saludos.
ResponderEliminarCaray que mona tu hermana,seguro que no era consciente del maravilloso edificio donde estaba celebrando el evento...
ResponderEliminarCuanto ha llovido desde los años en que la cafetería Manila se asentaba alli...nostalgia de ese Madrid hermoso sin tanta obra y destrozo como ahora.
Bonitas fotos de todas formas...besos
Completo reportaje y con buenas fotos, actuales y de documentación. Me gusta este Madrid.
ResponderEliminarSaludos.
La verdad es que podían haber eliminado también el anuncio de Schweppes. No le veo la gracia ni la estética por ningún lado. Es invasivo y anula la esbeltez de la torre.Resulta anodino y no resiste comparación con el emblema de Tio Pepe. Mejor sería que volvieran a coronar la azotea con el nombre CAPITOL.
ResponderEliminarTambién la cadena Vincci, propietaria del hotel, podría haber hecho un esfuerzo en recuperar, al menos en parte, el magnífico ambiente interior que los arquitectos dieron al hotel con los espléndidos muebles racionalistas de Feduchi, que forman parte de la historia del diseño español.
Estupendo tu artículo.
Estupendo tu artículo.