En el centro de la plaza de Oriente, nos encontramos ante una de las más bellas estatuas ecuestres del mundo, la estatua de Felipe IV, del escultor Pedro Tacca, el mismo autor de la estatua de Felipe III que se encuentra en la
Plaza Mayor y la colaboración de Juan Martínez Montañés, autor del busto del monarca. Velázquez pintó un cuadro de Felipe IV que se envió al escultor para la construcción de la obra, pero el encargo del monarca, exigía algo difícil y excepcional, quería que el caballo tuviera las dos patas delanteras levantadas, un difícil problema de equilibrio, pero fue Galileo Galilei el que ofreció la solución: hacer maciza la parte posterior del caballo y en hueco la parte delantera.
La estatua se construyó en 1640 y estuvo ubicada en el Jardín de la Reina, uno de los patrios del Palacio del Buen Retiro y después fue trasladada al Real Alcázar de Madrid hasta que fue pasto de las llamas en 1734 y volvió a su su enclave original del Palacio del Buen Retiro. Con tanto traslado, los madrileños pudieron leer en un panfleto que se instaló en la casa de la Panadería en la
Plaza Mayor que decía:
¿A qué vino el Sr. D. Juan?
A bajar el caballo y subir el Pan.
Pan y carne a quince y once,
Como fue el año pasado;
Con que nada se ha bajado
Sino el caballo de bronce.
En 1843 se emplazó en el lugar definitivo donde se encuentra hoy.
Estatua ecuestre de Felipe IV en el centro de la Plaza de Oriente
1 comentarios:
Es una de las mejores esculturas que tenemos en Madrid. Gracias por la info
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